El grupo de investigación liderado por Ana González-Pinto, jefa del Servicio de Psiquiatría de la OSI Araba, investigadora del Instituto de Investigación Sanitaria Bioaraba y miembro del CIBERSAM ISCIII, ha publicado un artículo colaborativo que analiza la eficacia de un programa de tratamiento cognitivo-conductual (TCC) específico para el abandono del consumo de cannabis (TCC-CC) frente al tratamiento habitual (TH) en pacientes consumidores de cannabis con primeros episodios psicóticos (PEP). El estudio demuestra que la terapia añadida al tratamiento antipsicótico consigue mejorar tanto el cuadro psicótico como el consumo de cannabis, y además logra mejorías en un menor tiempo. Este estudio tiene el valor añadido de que se ha realizado simultáneamente en varios centros de investigación del Estado.
Las y los investigadores han llevado a cabo un ensayo clínico aleatorizado multicéntrico de un año de seguimiento en el que 65 participantes fueron asignados aleatoriamente a TCC-CC o TH y han encontrado que las y los pacientes del grupo TCC-CC (experimental) tuvieron una mayor reducción del consumo de cannabis, menos síntomas psicóticos positivos y un mejor funcionamiento que el grupo del TH en el postratamiento. La respuesta al tratamiento fue también más rápida en el grupo TCC-CC, reduciendo el consumo de cannabis, la ansiedad y los síntomas psicóticos con respecto al grupo del TH en el seguimiento. Además, las y los pacientes que abandonaron y/o redujeron el consumo de cannabis durante el seguimiento, tuvieron una mayor disminución de los síntomas psicóticos y mayor conciencia de enfermedad, en comparación con aquellas y aquellos que continuaron consumiendo cannabis.
Los resultados de este estudio muestran que la intervención temprana, en la que se combinan técnicas psicológicas para el abandono del cannabis junto con técnicas encaminadas a la mejoría de la psicosis de inicio reciente (tratamiento integrado), es eficaz. Hasta ahora no se han conseguido terapias que mejoraran el consumo, debido probablemente a que no se tenía en cuenta el carácter dual del consumo de estas y estos pacientes.
Además de la OSI Araba, han participado en el estudio el Hospital Clinic de Barcelona, con la participación de Miguel Bernardo y Eduard Vieta, así como el King’s College de Londres, con Gonzalo Salazar de Pablo. En el trabajo han participado también Susana Alberich, matemática del CIBERSAM ISCIII e investigadora del IIS Bioaraba , y Enrique Echeburúa, catedrático emérito de la Universidad del País Vasco, que diseñó la terapia junto con más investigadores.